Un estudio reciente sostiene que en un beso francés de diez segundos de duración se transmiten hasta 80 millones de bacterias. Con beso francés nos referimos a aquel que conlleva un contacto entre las lenguas y un intercambio de saliva, una manifestación habitual de cariño en más de un 90% de las culturas.
El estudio, elaborado por la Organización Holandesa de Investigación Científica Aplicada, tomó como muestra a 21 parejas, quiénes previamente habían rellenado un cuestionario acerca de su hábitos en materia de besos.
La investigación concluye además que la flora bacteriana de una pareja tiene muchos más elementos compartidos que la de dos personas al azar, aunque esto no es sólo una cuestión de besos ya que, en líneas generales, las parejas suelen tener hábitos de vida en común.
Desde luego una curiosa noticia que queríamos compartir con vosotros pero no para quitaros las ganas de dar besos sino más bien todo lo contrario. Si vistas a tu dentista con regularidad tu salud bucodental nunca debería ser un problema. Y al final, amar es compartir, ¿no?